Aprender idiomas, 16/10/2014
Este año tocaba aprender idiomas.
Sí, porque si el B2+, porque si el certificado oficial de Cambridge, porque si el update de mi Currículum, porque un sinfín de motivos y un largo etcétera. Pues nada, si toca, toca.
Es octubre, hace buen tiempo, tiempo tengo de sobra, la escuela de idiomas BCN Languages está, mira tú que casualidad, al lado de mi casa. Voy a la recepción, me informo, me matriculo, empiezo. ¡Guay!
Pero es fácil que las ganas vayan pasando poco después de las primeras clases del curso.
Porque, bueno, en realidad mi cabeza no estaba tanto para cursos de idiomas. Pero ahora ha empezado el segundo mes del curso y la cosa va mejor porque esto no parece una academia de idiomas al uso.
Aquí los profesores son gente joven, nativos de todas las partes del mundo y muy viajados. Son profesores muy motivados que nos ayudan con su entusiasmo hasta las 10 de la noche de un miércoles, por ejemplo, ¡cuando ya no estás para pensar en inglés o en alemán o en ruso!
De echo, algún día que ya no podía más de mi semana laboral, el gimnasio, los niños, el perro…pues no iba a clase presenciales. En BCN Languages, todos sus cursos tienen asociado un Campus Virtual donde puedes ver, además de los links de interés de cultura general del país del idioma que estudias, lo que han dado en aquella sesión particular que te perdiste y los deberes para la siguiente. Es una manera excelente para no desmotivarte si algún día flaqueas y es un servicio complementario idóneo para no dejar ningún curso a medias (como con el gimnasio el año pasado).
Sandra Romero
Alumna de BCNlanguages
